MARE NOSTRUM - Vol. II SUEÑO
Esta etapa la identifico entre el limbo de consciencia e inconsciencia. El sueño. Lo divido en dos estadios: el pre-sueño y el sueño-inconsciente.
El pre-sueño. Es un estado meditativo muy profundo. Aunque, a veces, a la mínima sensación física consciente me despierto. Realmente, empiezo a perder consciencia poco a poco. Me empiezo a difuminar. Y me pierdo en un camino de confusión. Aunque puedo tener sensaciones físicas concretas y momentos conscientes, se que estoy aquí, en mi cama, en esta realidad. Es una especie de limbo dimensional. Pierdo la noción del espacio y del tiempo. Y, por momentos, siento que vuelo. Que viajo, que me desplazo. -
- Me dejo llevar por el agua, dejando el control. Me siento como en un columpio o un tobogán. Con esa pequeña sensación de vértigo que tenía de pequeño al estar arriba de todo. Tengo claridad con respecto a la oscuridad. Nublado. Difuso. No concreto, no específico. Entre caos y claridad - aka el limbo. Estoy pero no estoy. Empiezo a soñar. A volar. Me encuentro entre el cielo y el agua. Empiezo a dejar el cuerpo físico. Me siento cómodo, a gusto. Me siento completo. Protegido. Casa. Família. ¿Y si me duermo y no vuelvo a la realidad? -
El sueño-inconsciente. Nave que despega sin dirección. Hacia lo profundo, mar adentro. Sin rumbo. Azul oscuro. Aunque me resista, me lleva. No hay vuelta atrás. Como cuando me coge una ola y empiezo a dar vueltas dentro del agua, cual remolino. Desorientado, muy confundido. Muy difuminado. Mucho. No diferencio sueño de realidad. Es borroso, aunque con momentos muy claros y concretos. Tengo imágenes muy vivas, aunque no son reales. Ese limbo se hace aún más presente. No sé quién soy. No me identifico con nada de mi ser. Sólo con las imágenes. Me permito volar completamente. Sin miedos ni cadenas. Me lanzo al vacío, a la inmensidad. Vuelo con las alas abiertas, de par en par. Confío.
- Oscuridad con destellos de claridad. Con destellos de Luz. Estrella fugaz en el cielo oscuro de la noche. Viaje. No consciencia. Mi cuerpo no está aquí. Nubes negras. Cielo tapado. Con tormenta. Sin pensamientos ni juicios. Mar. Profundidad. Azul oscuro, casi negro, como el fondo del mar. My blackness calls me back. -
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Interpretación y montaje de Víctor Rojano
Dirección de Fotografía de Alejandra Céspedes
Dirección de Arte de Aran Escudero